Este apartamento se encuentra en el último piso de un edificio de apartamentos del siglo XIX en el centro de Oslo, en Noruega. La compra de la buhardilla encima de la vivienda permitió a los clientes hacer una reforma a gran escala, uniendo los dos pisos en uno solo, el espacio unificado.

Al utilizar plenamente los cambios de nivel y oportunidades se introdujo un elemento espacial con líneas verticales, una escalera suspendida que se completa con un mueble de madera en este luminoso loft reformado por el estudio londinense Haptic. Se trata de un elemento funcional necesario al unir el piso inferior con la buhardilla y, en vez de esconderlo, se utiliza para articular la vivienda. En la reforma de esta vivienda, la escalera pasa de ser un obstáculo a ser el punto fuerte que configura los diferentes espacios que la componen.

La nueva escalera flotante no sólo conecta los espacios vivideros en el piso inferior con un altillo encima, sino que también crea una división sutil entre la cocina y el salón. Hecha de acero blanco con acabado epoxi, la escalera cuelga de una viga del techo y de la pared superior. Sus esbeltos soportes verticales forman una balaustrada, mientras que las contrahuellas abiertas permiten tener vistas desde el piso inferior. Las escaleras se detienen antes de llegar al suelo, por lo que los usuarios tienen que terminar de bajar al piso inferior a través de un mueble de madera que funciona como un espacio de almacenamiento con cajones y un asiento bajo la ventana al mismo tiempo.

El diseño :
A través de un estudio a fondo y en tres dimensiones de la vivienda, así como un cuidadoso tratamiento de los medios de evacuación, los arquitectos han sido capaces de incorporar todos los rincones e incluso parte de la escalera en el diseño de la vivienda.

La soleada terraza tiene un gran cerramiento de de vidrio que deja pasar la luz del atardecer al apartamento.

Se ha sacrificado una parte del espacio del loft para crear un espacio de doble altura sobre la sala de estar.

Cuarto de baño:
El cuarto de baño incorporado con el dormitorio principal se organiza en tres niveles y mediante el uso de azulejos de gran escala de 100×300 cm, da la impresión de que está tallado en un solo bloque de piedra.

Cocina :
La cocina original era demasiado estrecha, ineficiente y daba al norte . Moviéndola a las zonas comunes se consiguió crear un espacio amplio, luminoso y espacioso que se convierte en el centro social y se integra con el resto de la vivienda . Una pequeña chimenea está integrada en la encimera de la cocina y las puertas de los armarios de la cocina están pintados del mismo color que la chimenea para que se fundan con ésta.

 Imágenes: Haptic Architects